Este domingo 11 de noviembre ha sido uno de esos días
inolvidables. Gente que se reúne y re-une para cumplir el sueño de un niño que
hasta antes de este día sólo pensaba en que los sueños, sueños son. Pero
gracias a la voluntad, el amor y la “acción válida”, un término que explicaré
más adelante, logramos demostrar que es posible volver realidad los sueños. Y
es en estas acciones que se fundamenta eso de que la “Unión hace la Fuerza”, y
no una fuerza destructora, o una fuerza impositiva y sufriente, sino una Fuerza
Creativa y Amorosa, de esas fuerzas que empujan hacia tiempos mejores y a la
construcción de personas mejores.
Junto a Claudia, Alejandro, Mariela, Joanna, Gonzalo, Raisa,
Alejandra, Jenny, Mario, los maridos y esposas de los anteriores, los hijos e
hijas, nietos y nietas, sobrinos y sobrinas, los que se me olvidan y los que no
conozco, muchos más que de una forma u otra permiten que logremos estos
momentos mágicos. A todos ellos nuestra gratitud sincera y gigante.
Hacer aquellas acciones que nos acercan a la felicidad, que
son coherentes con nuestro pensar y nuestro sentir, que reafirman nuestra
humanidad y van en directo beneficio de una evolución positiva del Ser humano y
al mismo tiempo dan Sentido a nuestra vida, es lo que se llama una “Acción
Valida”… y toda acción (válida o no) se acumula en nuestro interior, generando
felicidad o sufrimiento. Mientras más Acciones Unitivas (coherentes y válidas)
acumulemos más lejos estaremos del sufrimiento. Las Acciones Contradictorias
nos alejan. Es por eso que mucha gente sufre en este mundo pues Hace todo lo
contrario a lo que Siente y Cree que debe hacer.
Pero es un tema largo de conversar, ahora sólo nos queda
agradecer en nombre de Exequiel por el sueño cumplido a todos los que se nos
unieron para lograr la fuerza necesaria que levantara el amor.
Gracias.
Larry Malinarich
TITERIKE
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